Durante la madrugada de este jueves 12 de diciembre, se dio un brutal crimen a manos de un sicario en el barrio porteño de Recoleta: un hombre buscaba ingresar a un kiosco ubicado sobre la calle Paraguay -entre Agüero y Laprida- cuando fue sorprendido por una segunda persona que le disparó tres veces y lo mató por la espalda. Según testigos y las imágenes de la cámara de seguridad, no hubo ninguna conversación entre ambos.
Personal policial de la Comisaría Vecinal 2B escuchó, a la 1 de la madrugada de este jueves, diversas detonaciones de arma de fuego y rápidamente se dirige al lugar, donde encuentra a un hombre mayor de edad tirado en el suelo con tres impactos de arma de fuego en la espalda. Si bien se convoca a personal del SAME proveniente del Hospital Fernández, el atacado no sobrevivió al ataque y la muerte fue constatada. Aún se desconocen los motivos que ocasionaron el ataque.
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"Se desconocen al momento los datos filiatorios. Se toma contacto con un testigo quien afirma que el agresor desciende de vehículo y sin mediar palabra efectúa por la espalda varios disparos contra la víctima para luego huir a pie", indicaron desde la Policía de la Ciudad de Buenos Aires.
Por su parte, autoridades informaron que en el lugar del hecho se secuestro el vehículo señalado por el testigo (que estuvo ahí 24 horas antes) y cuatro vainas servidas. El hecho está siendo investigado por la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 13, a cargo del Dr. Marcelo Roma, Secretaría del Dr. Maximiliano Datsira, quien dispuso actuaciones por homicidio. Cabe señalar que el arma con la que se realizó el ataque lleva silenciador. Ahora, efectivos buscan por los testigos presentes en la zona al momento del hecho.
A horas del brutal crimen, todavía se desconoce el nombre del hombre asesinado frente a una cámara de seguridad donde se observa el hecho con nitidez. Tras los balazos y luego de rematarlo, en medio de un forcejeo, el sicario terminó quitándole la riñonera y llevándose sus pertenencias. Según indicaron, la víctima tendría poco más de 50 años, una estatura mediana y era calvo -tal como se observa en los imágenes-; llevaba lentes y vestía una chomba y bermudas.
Fue trasladado en las últimas horas a la Morgue Judicial de la Corte Suprema de Justicia, ubicado en la calle Viamonte, para realizar la autopsia correspondiente. Hasta ahora, no se presentó ningún testigo en sede policial. Mientras tanto, el fiscal busca dar con el paradero de la pareja que estaba frente al kiosco y huyó cuando se dio el ataque; un hombre y una mujer que, por su aparición en el video, son testigos de interés.