Dominique Pelicot, condenado a 20 años de cárcel por un tribunal francés por drogar y violar repetidamente a su entonces esposa Gisèle durante casi una década e invitar a decenas de desconocidos a violarla, no recurrirá la sentencia, dijo el lunes su abogada, aunque se celebrará un nuevo juicio al sí haber recurrido 17 del resto de acusados.
Gisèle Pelicot, de 72 años, se ha convertido en un símbolo del coraje y la resistencia femeninos durante los tres meses que ha durado el juicio contra su ahora exmarido y los otros 50 acusados, de un caso que ha horrorizado al mundo entero. Todos fueron declarados culpables por el tribunal el 19 de diciembre.
"Decidió no apelar, porque dice que supondría un nuevo calvario y nuevos enfrentamientos para su mujer, de la que siempre dijo en los debates que no era su adversaria", dijo a la radio FranceInfo Beatrice Zavarro, abogada de Dominique Pelicot.
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Dominique Pelicot, casado con Gisèle durante 50 años, se había declarado culpable y el tribunal, compuesto por cinco jueces, le impuso la pena máxima, como había solicitado la fiscalía.
El tribunal declaró a 46 de los demás acusados culpables de violación, a dos de intento de violación y a otros dos de agresión sexual, y les impuso penas de entre tres y 15 años de cárcel, menos de los entre cuatro y 18 años que pedía la fiscalía.
De momento, 17 han declarado que recurrirán la sentencia y los demás tienen hasta la medianoche del lunes para decidir.
Proceden de todas las profesiones y condiciones sociales: camioneros, soldados, bomberos, guardias de seguridad, trabajadores agrícolas, empleados de supermercado, periodistas y desempleados.
Muchos de los acusados habían negado los motivos de su imputación alegando que pensaban que se trataba de un juego sexual consentido y orquestado por la pareja y argumentando que no era violación si el marido lo aprobaba.
Dominique Pelicot, de 72 años, negó haber engañado a los hombres, a los que había conocido por internet, afirmando que sabían exactamente lo que estaban haciendo.
El juicio ha desencadenado concentraciones de protesta en toda Francia en apoyo de Gisèle y ha estimulado un examen de conciencia, incluido un debate sobre la conveniencia de actualizar la ley francesa sobre violación, que en la actualidad no menciona que las relaciones sexuales deban implicar consentimiento.
Gisèle Pelicot afirmó no tener miedo a un nuevo juicio, según dijo su abogado a principios de mes.
"No tiene miedo. Si ocurriera, ya nos ha dicho que lo afrontaría, si goza de buena salud, claro, porque hoy tiene 72 años", dijo su abogado.
Con información de Reuters
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