La emotiva salida de Sandra Borghi de la pantalla de El Trece y TN destapó una inesperada olla de presión interna. Lo que debía ser un cierre de ciclo cordial terminó exponiendo el enojo de Sergio Lapegüe, quien no dudó en marcar la enorme diferencia entre los honores que recibió su compañera y la frialdad con la que el canal manejó su propia partida.
El tema estalló en el programa Lape Social Club, cuando la columnista Marina Calabró puso sobre la mesa los números y gestos que diferenciaron ambos adioses. La comparación dejó en evidencia un trato preferencial que el conductor, con más antigüedad en la empresa, sintió como un ninguneo.
El punto de quiebre fue la revelación de un correo electrónico interno enviado por Ricardo Ravanelli, gerente de noticias de Artear, dedicado exclusivamente a Borghi. En el texto, la autoridad del canal elogiaba los "25 años de intensidad" de la periodista, destacando su rol en la calle y su evolución hasta la conducción. "Gracias por haber defendido la camiseta con tanta pasión", rezaba el mensaje oficial.
Ante este dato, Calabró fue directa y le consultó a Lapegüe: "¿A vos te hicieron carta mail de despedida?". La respuesta del conductor fue un "no" rotundo, dejando en claro que, pese a sus 34 años en el Grupo Clarín, no hubo tal gesto institucional hacia él.
La polémica por el tiempo
La indignación no terminó ahí. La columna de espectáculos cronometró los tiempos de aire cedidos para cada despedida, exponiendo una brecha insólita: mientras Sandra Borghi: tuvo 7 minutos y 40 segundos en pantalla para hablarle a la audiencia, Sergio Lapegüe apenas contó con espacio para unas palabras breves. "34 años... No me despidieron todavía, me dieron la oportunidad de hablar dos minutos", disparó Lapegüe.
