El Papa Francisco, de 88 años, volvió a sufrir una nueva caída este jueves y debió ser asistido por médicos del Vaticano, para asegurar que se encuentra en buen estado de salud. Según indicaron las autoridades, el golpe del Sumo Pontífice no dejó como consecuencia ninguna fractura en su cuerpo pero debieron inmovilizar uno de sus brazos "por precaución".
“Esta mañana, debido a una caída en la Casa Santa Marta, el papa Francisco sufrió una contusión en el antebrazo derecho, sin fractura. El brazo fue inmovilizado como medida de precaución”, expresaron en un comunicado. Posteriormente, en diversas audiencias en las que participó, se lo observó con un cabestrillo en el brazo del golpe.
Además, Bergoglio se mostró con un importante moretón en la barbilla producto de otra caída, el pasado 7 de diciembre, cuando se golpeó contra su mesita de noche.
El Sumo Pontífice lidió con diversos problemas de salud en los últimos años. Desde largos episodios de bronquitis o resfriados, que no le permitieron presidir -por ejemplo- el rezo del Ángelus dominical desde la ventana del Palacio Apostólico, hasta usar silla de ruedas debido a los severos dolores en ambas rodillas. Por otro lado, utiliza un andador o un bastón para desplazarse y evitar este tipo de caídas.
La fuerte denuncia del Papa por el caso Loan
El Papa Francisco señaló que una de las principales hipótesis que manejan las fuerzas de seguridad y las autoridades que investigan con respecto a la desaparición de Loan Danilo Peña es que "haya sido víctima del tráfico de órganos". El pequeño de cinco años, desaparecido en el paraje Algarrobal de la localidad correntina de 9 de Julio, el 13 de junio pasado, sigue siendo una incógnita para la justicia argentina. A más de 200 días del hecho, se desconoce su paradero y lo que ocurrió con él.
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Este miércoles, el Sumo Pontífice dedicó su catequesis de la audiencia general a "los cientos de millones de menores se ven obligados a trabajar"; muchos de ellos en situaciones peligrosas. "Por no hablar de los niños y niñas que son esclavos de la trata para la prostitución o de la pornografía, y de los matrimonios forzados... Cuando en la calle, en el barrio de la parroquia, esas vidas perdidas se ofrecen a nuestra mirada, a menudo miramos hacia otro lado", agregó.
En ese marco, en el Aula Pablo VI, el Papa se apartó del texto preparado para la misa y se refirió específicamente al caso de Loan. "Una de las hipótesis es que se lo llevaron para extraerle los órganos, para hacer trasplantes. Y esto se hace, ustedes lo saben. Esto se hace. Algunos vuelven con una cicatriz, otros mueren. Es por eso que me gustaría recordar hoy a este chico Loan", sostuvo.