El café de especialidad está en pleno auge en Argentina, y Buenos Aires no se queda atrás. Con más de 334 cafeterías en la ciudad, según datos del Gobierno porteño de 2023, los amantes del buen café tienen cada vez más opciones para disfrutar. Pero hay una que se destaca por su originalidad y su conexión con un modelo exclusivo que solo existe en seis ciudades del mundo.
En La Plata, un grupo de emprendedores decidió revivir una esquina icónica de la ciudad, inspirándose en los Starbucks Roaster, un concepto que combina café de especialidad con una experiencia visual única. ¿El resultado? Un lugar que no solo ofrece café de alta calidad, sino que también te invita a vivir un viaje sensorial.
Una esquina con historia en La Plata
La famosa confitería La París, ubicada en la esquina de la avenida 7 y la calle 49, creada en 1940, fue durante décadas un punto de encuentro obligado para los platenses. Ubicada cerca de edificios emblemáticos como el Pasaje Dardo Rocha y el Jockey Club, este local fue testigo de épocas de gloria en los 80 y 90. Sin embargo, con el tiempo decayó, y la pandemia terminó por cerrar sus puertas.
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Pero todo cambió cuando Ramiro Bidart y los hermanos Marcelo y Carlos Leuzzi, dueños de más de 40 locales gastronómicos en Argentina y Miami, decidieron darle una nueva vida al lugar. Con una inversión ambiciosa, alquilaron el local por 20 años y lo transformaron en un espacio moderno y multifuncional, manteniendo su esencia histórica.
Inspiración en Milán: el modelo Starbucks Roaster
¿Qué tiene de especial este nuevo local? Su inspiración viene directamente de los Starbucks Roaster, un modelo que solo existe en seis ciudades del mundo: Nueva York, Chicago, Tokio, Milán, Shanghái y Seattle. Estos locales no solo sirven café, sino que también tuestan y muelen los granos a la vista, usando máquinas que son una atracción en sí mismas.
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En el caso de La Plata, los emprendedores instalaron una máquina Probat en el centro de la confitería, que procesa granos de café de Perú, Colombia, Brasil y México. Los tubos que transportan el café recorren todo el local, creando un espectáculo visual que fascina a los visitantes.
La máquina Probat abastece al local y también provee café de especialidad a otros 30 negocios de La Plata, lo que además permite a los emprendedores ofrecer un producto de alta calidad a un costo accesible, consolidando su apuesta por el café gourmet.
Más que una cafetería: gastronomía, cócteles y educación
Este nuevo ícono platense no se limita al café. Con 3700 m², el local ofrece una experiencia gastronómica completa: podés almorzar, cenar, disfrutar de cócteles o incluso pedir comida para llevar. Además, cuenta con un sector de pastelería y un pequeño museo que conserva utensilios históricos de la antigua confitería La París, incluyendo fotografías y su icónico cartel.
Además, en el edificio vecino, que estaba abandonado, los emprendedores instalaron una sede del IAG, la escuela de gastronomía liderada por el chef Ariel Rodríguez Palacios. Hoy, 500 alumnos cursan ahí sus estudios, convirtiendo a esta esquina en un polo gastronómico y educativo.
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