El Banco Central de la República Argentina tomó una decisión respecto de la actividad bancaria en estas fiestas. Además de confirmar que las entidades financieras estarán cerradas el 25 de diciembre y 1 de enero, definió que pasará en los días previos.
Al respecto, desde el gobierno nacional encabezado por Javier Milei dispusieron que tanto el 24 cómo en 31 de diciembre, las antesalas a Navidad y Año Nuevo, los bancos tampoco abran sus puertas para la atención al público.
En ese sentido, desde el Banco Central dispusieron "otorgar asueto para su personal los días 24 y 31 de diciembre e invitar a las entidades financieras y cambiarias de todo el país a adoptar la misma medida respecto a su personal". Dicha decisión fue acompañada por las asociaciones de bancos en un comunicado.
Esto significa que todas las sucursales estarán cerradas y sólo se podrán realizar transferencias de forma virtual y retirar fondos a través de la red de cajeros automáticos.
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Este es el motivo por el que no deberías imprimir el ticket del cajero automático
Cuando se retira dinero de un cajero automático, el sistema suele ofrecer la opción de imprimir un ticket que detalla la operación y el saldo disponible en la cuenta. Sin embargo, aceptar esta impresión no siempre es la mejor decisión, ya que puede implicar riesgos innecesarios.
Los comprobantes emitidos por los cajeros contienen datos sensibles que, si caen en las manos equivocadas, podrían ser utilizados para llevar a cabo fraudes o estafas. Por ejemplo, los delincuentes pueden emplear la información de la tarjeta que figura en el ticket para acceder a las cuentas bancarias.
Además, si el comprobante se desecha sin destruirlo adecuadamente, alguien podría recuperarlo y emplear esos datos de manera malintencionada, incluso llegando a vaciar las cuentas de la víctima. Por esta razón, se recomienda no imprimir estos tickets, o bien conservarlos de manera segura si se decide hacerlo.
Algunas recomendaciones para protegerse de estafas bancarias
Tanto al operar en cajeros automáticos como al realizar transacciones mediante home banking, es fundamental adoptar medidas de seguridad para evitar ser víctima de fraudes. Algunas pautas esenciales incluyen:
- No compartir claves ni códigos de seguridad: Bajo ninguna circunstancia se deben proporcionar claves, tokens o contraseñas a través de e-mails, mensajes de texto, WhatsApp, redes sociales ni llamadas telefónicas. Ningún banco solicita estos datos de forma directa.
- Evitar brindar información completa de las tarjetas: Los operadores bancarios no pedirán nunca todos los datos de una tarjeta de crédito o débito, ni siquiera al guiar en una operación. Si alguien lo solicita, es probable que se trate de un intento de fraude.
- Verificar la autenticidad del remitente: Asegurarse de que los e-mails provengan de una fuente confiable. Esto incluye revisar que la URL tenga el protocolo "HTTPS" y un ícono de candado.
- Activar alertas de consumo: Desde la plataforma de home banking se pueden configurar notificaciones para estar al tanto de los movimientos realizados con las tarjetas. En caso de recibir mensajes sospechosos o llamadas solicitando datos, es preferible interrumpir la comunicación y contactar directamente al banco a través de los números oficiales que figuran en las tarjetas.
- Adoptar estas prácticas reduce significativamente el riesgo de sufrir estafas y protege tanto los datos personales como el dinero en las cuentas bancarias.