Una vez más, la Casa Rosada espera que los gobernadores dialoguistas presionen a diputados y senadores para sortear con éxito esta semana en el Congreso que se ve complicada en base a tres temas: los pliegos de los jueces Ariel Lijo y Manuel García Mansilla, la conformación de una comisión para investigar el cripto escándalo y el DNU que firmó este lunes para habilitar un acuerdo con el FMI. Los gobernadores amigos ya le dieron una gran mano semanas atrás para frenar que la comisión se creara en el Senado, a costa de un nuevo descrédito para la bancada de la UCR que primero propuso y luego rechazó esa instancia investigadora. Pero, ahora, las cuestiones en debate son diversas y complejas, parece difícil que el dialoguismo resuelva todos los frentes que el propio Ejecutivo insiste en abrir.


Respecto al pliego de los candidatos del Gobierno para la Corte Suprema, Unión por la Patria está a la búsqueda de juntar los votos para el rechazo en una sesión aún sin fecha. Lijo ya tiene dictamen y será cuestión que se constate que no cuenta con los dos tercios necesarios para ser designado, con lo que se resignará a continuar como juez federal. El caso de García Mansilla, en tanto, ofrece varias particularidades. Para empezar, ya juró como integrante de la Corte en comisión por lo que, según el Gobierno, aún si le rechazan el pliego, continuaría en el máximo tribunal hasta el fin del año legislativo. Hay juristas que sostienen lo contrario.
Con todo, todavía no tiene dictamen porque le falta una firma. El bloque radical debate qué hacer, imaginando que pueden sostener una postura común, que hoy se ve difícil. Hay senadores radicales que sostienen que hay que rechazar ambos pliegos por el solo hecho de que el Gobierno haya decidido designarlos por decreto. Los gobernadores Alfredo Cornejo, Gustavo Valdés, Maximiliano Pullaro y Leando Zdero ya mostraron que tienen un ascendente importante sobre lo que finalmente resuelva la bancada.
Este lunes quedó oficializada la convocatoria a una sesión especial en Diputados para el miércoles a las 12 con el objetivo de tratar todas las iniciativas respecto del criptoescándalo. Tendrán 30 minutos para reunir los 129 diputados necesarios para dar inicio a la sesión y debatir los diez proyectos presentados por las bancadas de Unión por la Patria, Democracia para Siempre, Encuentro Federal, Coalición Cívica y el FIT, que van desde pedidos de interpelación, pedidos de informes y, de nuevo, la creación de una comisión investigadora. Desde el Gobierno vienen ofreciendo a las bancadas dialoguistas que vaya el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, a responder las preguntas de los bloques opositores. En principio, no resultaría suficiente para los diputados que reclaman respuestas convincentes por parte de Javier Milei y su entorno.
De nuevo, en la Rosada apelarán a los buenos oficios de algunos gobernadores amigos para que no le regalen una tribuna a la oposición dura que representa el kirchnerismo. Los gobernadores dialoguistas entienden que en sus provincias Milei mantiene buenos números de apoyo y quieren verlos colaborar con él, además de afinar el vínculo con una gestión que es muy dura con las cuentas provinciales. Desde las bancadas dialoguistas le hicieron saber al Gobierno que, en caso de que se cree la comision investigadora, no tiene en sus planes convocar de movida, por ejemplo, a Karina Milei ni nada que se le parezca, sino que será un trabajo progresivo. El Ejecutivo cree que ya tiene bastante con los