Después de un nuevo cortocircuito entre lo que dice el Gobierno y lo que sostiene el FMI, Javier Milei salió este jueves a ratificar el monto de un futuro acuerdo que había anunciado horas antes su ministro de Economía, Luis Caputo, aunque desmintió la versión que trascendió desde su Gobierno y que indicaba que la totalidad del dinero será entregado bajo la figura de libre disponibilidad. En una entrevista radial, sin embargo, el mandatario reconoció que aún no está definido cómo serán los desembolsos.
Cuando le preguntan si un acuerdo con el Fondo podría adelantar el levantamiento del cepo, que hasta ahora había pronosticado para el 1 de enero de 2026, Milei respondió: "Depende de cómo me estructuran los desembolsos". Se mantuvo firme en que el levantamiento del cepo no disparará el precio del dólar porque "técnicamente no tiene aire para subir el tipo de cambio". Según reiteró, "vamos a ir a una relación de 50.000 millones de dólares de reservas y 26.000 millones de dólares de base monetaria", y concluyó: "Vamos a estar muchísimo más cubiertos que en la convertibilidad".
Defendió a Caputo frente al silencio del FMI
Después del anuncio del ministro de Economía, la vocera del Fondo, Julie Kozack, sostuvo que el monto lo determinará el Directorio y hasta adelantó que los desembolsos serán por tramos, como es costumbre del organismo de crédito internacional. Por eso, uno de los mensajes centrales de Milei en la entrevista fue ratificar el monto anunciado por Caputo y contar que la titular del FMI, Kristalina Georgieva, le había dado la luz verde para informarlo anoche. "La operación en la que estamos trabajando es una operación por 20 mil millones de dólares, que sumado a lo que estaría aportando el Banco Mundial, el BID y CAF permitiría llevar las reservas internacionales brutas a 50 mil millones de dólares", sostuvo, poniendo en condicional el monto total de 50.000 millones de dólares, cifra sobre la que basó luego todos sus pronósticos.
Además, sostuvo que se trata de un acuerdo inédito, en un intento por despegarse de acuerdos pasados con el Fondo, a los que él, como economista y panelista televisivo, había criticado. "Este acuerdo no sube la deuda, porque es tomar esos fondos del Banco Central para pagar la deuda que tiene el Tesoro con el Banco Central. Eso implica que al mejorarle el respaldo a los pesos, la moneda vale más y hay menos inflación. Esto no pasó nunca. La deuda va a bajar después de esto, porque los títulos no cotizan a la par y vamos a poder cancelar más deuda, vamos a poder hacer un saneamiento del Banco Central con caída de la deuda total ", sostuvo.
Culpó al peronismo de la volatilidad financiera y cambiaria
Otro eje de su mensaje fue restarle importancia a la volatilidad financiera -que economistas y analistas de todo el arco político vinculan a la falta de credibilidad que genera el actual plan económico basado en un dólar oficial barato- de las últimas semanas. Dijo que es por causa de "un intento de golpe en lo que tiene que ver en la cuestión institucional política, en la calle y en los mercados".
Como ya es costumbre, acusó al kirchnerismo. "Días atrás, en el Congreso, el kirchnerismo quiso hacer un golpe desde la vía institucional. Cristina está nerviosa porque casación le revocó el recurso y ya sabe que va a ir presa. Este es el dato. Cristina sabe que va a ir presa. Está quemando las naves", sostuvo y luego agregó de manera despectiva: "La señora va a ir presa y eso la tiene como loca".
También rechazó que haya habido abusos o errores en la cruenta represión contra la marcha de los jubilados de hace dos semanas. "Lo que pasó el miércoles 12 en las calles no fue trivial. ¿La última manifestación cuánto tardó en desarmarse? 20 minutos. Son muy revoltosos dos horas. Nosotros teníamos los barrabravas que eran peores que los hooligans, duraban dos horas en un combate. ¿Cuánto duraron los enfrentamientos el miércoles 12? Nueve horas. Está claro que no eran barras, eran mercenarios. Era gente que fue a hacer cosas pesadas por dinero, que es la operatoria de la izquierda Lo financiaron intendentes de la provincia de Buenos Aires ", denunció sin presentar ni una prueba concreta y concluyó: "Probaron por la vía institucional, probaron por la vía de la violencia y además por la vía de mercado".
Otra vez, se desligó del escándalo cripto
El Presidente sigue rechazando cualquier protagonismo en el escándalo cripto que resultó del lanzamiento de la memecoin $Libra, que él mismo promocionó desde sus redes durante horas, incluso luego que la mayoría de los que ganaron millones retiraron su dinero y la cotización se desplomó.
"Bueno sí. Está claro que no lo hubiera hecho. Sin embargo, los medios informan parcialmente. La Securities and Exchange Commission dijo que no era 'security' y por lo tanto no había estafa. La demanda que se hizo en la Corte Suprema de New York, que se juntaron 200 damnificados, no fue por estafa, fue por publicidad engañosa y yo no estoy ahí. La única demanda que está en Estados Unidos contra mí la hizo Gregorio Dalbón", sostuvo y para terminar de argumentar, concluyó:
"Que usted no entienda algo no quiere decir que sea una estafa".
Milei, negacionista
En medio del debate económico, el Presidente se enfocó de nuevo en su defensa de la Teoría de los Dos Demonios que busca equiparar los crímenes de la última dictadura cívico-militar a los de las guerrillas, que en su mayoría ya estaban diezmadas para el momento del golpe de Estado, el 24 de marzo de 1976. "El terrorismo en argentina comenzó en 1969 y la triple A la creó un gobierno peronista y la metodología de desaparición de personas la inventó el peronismo", sentenció el mandatario, otra vez cargando sobre el principal partido opositor.