Netflix ha encontrado en las miniseries una fórmula efectiva para atraer a su audiencia. Los suscriptores de la plataforma buscan contenido que les permita sumergirse en una historia sin la necesidad de comprometerse con una producción extensa.
Pero si hay algo que genera aún más interés, es el hecho de que la historia esté basada en hechos reales. En este sentido, una de las últimas producciones en captar la atención del público es El Gatopardo, una miniserie italiana que rápidamente se posicionó entre lo más visto del catálogo. Sin embargo, quienes la ven no tardan en preguntarse: ¿está basada en hechos reales o es pura ficción?
¿El Gatopardo está basada en hechos reales?
La respuesta es que sí, aunque con matices. El Gatopardo es una miniserie basada en la novela homónima de Giuseppe Tomasi di Lampedusa, un clásico de la literatura italiana. La historia está ambientada en la Sicilia del siglo XIX, en pleno proceso de unificación italiana, y sigue la vida de la familia Corbera, encabezada por Don Fabrizio Corbera, Príncipe de Salina, interpretado por Kim Rossi Stuart.
El personaje de Don Fabrizio Corbera no existió como tal, pero tiene una inspiración real: Don Giulio Fabrizio Tomasi, el 8º Príncipe de Lampedusa y bisabuelo del autor de la novela. Giuseppe Tomasi di Lampedusa tomó diversos aspectos de su bisabuelo para construir la figura del protagonista, desde su apariencia física hasta su forma de ver el mundo y su rol en la política de la época. Un hecho clave que se traslada a la ficción es su rechazo a un puesto en el Senado, un gesto que simboliza la resistencia de la aristocracia a los cambios políticos que trajo consigo la unificación de Italia.
Además de la influencia de su bisabuelo, Tomasi di Lampedusa también incorporó experiencias personales en la obra. Al igual que Fabrizio Corbera, el autor fue un noble que presenció la decadencia de su linaje y sintió nostalgia por un pasado que se desvanecía. Incluso el ficticio pueblo de Donnafugata, donde transcurre gran parte de la historia, está inspirado en Santa Margherita di Belice, el lugar donde el escritor pasó su infancia.
Por último, otro de los grandes temas de El Gatopardo es el fin de una era, reflejado en la relación entre Fabrizio y su sobrino Tancredi, un joven que abraza los cambios políticos de la época al unirse a los Camisas Rojas de Garibaldi. Esta dinámica representa la transición real que muchas familias nobles sicilianas experimentaron en el siglo XIX, cuando la aristocracia perdió su poder y las nuevas clases emergieron con fuerza.