En la cultura argentina hay muchos Santos Populares a los que se le rinde tributo y si bien hay algunos conocidos por todos cómo La Difunta Correa o el Gauchito Gil, hay otros que gozan de menos renombre pero que tienen una rica historia.
Uno de esos casos es el de Juan Bautista Bairoletto, conocido cómo el Robin Hood de Las Pampas y que sirvió de inspiración para una de las canciones más populares de nuestro rock nacional.
Bairoletto nació el 11 de noviembre de 1894 en en una chacra de la localidad de Carlos Pellegrini, Santa Fe, fue el segundo hijo de seis hermanos de padres italianos. De adulto escapó de la Justicia luego de haber matado al comisario de la ciudad de Eduardo Castex, en La Pampa, durante una disputa amorosa por una prostituta del lugar.
Pese a ser acusado de hurtos, repartos de propaganda anarquista, asaltos y muertes, Juan Bautista provocaba una gran admiración en parte del pueblo. Además, según cuenta su historia, le robaba a los ricos y le regalaba a los pobres las cosas, por este motivo inevitablemente se ganó el apodo de "el Robin Hood de Las Pampas".
Más allá de esas historias, también se relata que encabezaba una banda violenta y brutal que robaba las estancias más grandes y millonarias de la época y allí no tenía piedad con sus víctimas. Fue uno de los fugitivos más perseguidos por la Policía en varias provincias, hasta que en septiembre de 1941 fue asesinado por los efectivos.
También existe la teoría de que al verse acorralado por la Policía, Bairoletto se pegó un tiro para evitar ir preso. Tras su muerte se convirtió en un mito, sobre todo en Mendoza donde encontró su final. En su tumba levantaron un altar donde le llevan ofrendas hasta el día de hoy.
La canción del rock nacional que recordó la figura de Bairoletto
La figura de este Santo Popular fue creciendo con el tiempo a punto tal que sus "hazañas" quedaron inmortalizadas en "Bandidos Rurales", uno de los temas más reconocidos de León Gieco. También así se llama el duodécimo álbum del cantautor.
"Nacido en Santa Fe en 1894, cerca de Cañada, de inmigrantes italianos, Juan Bautista lo llamaron, de apellido Bairoletto. Bailarín sagaz, desafiante y mujeriego, winchester en el recado, dos armas cortas también. Un cuchillo atrás y un caballo alazán, raya al medio con pañuelo, tatuaje en la piel. Quedó fuera de la ley, quedó fuera de la ley", comienza la canción que relata un poco más de su vida y luego toma a otros bandidos populares de la época.
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