Walter Hugo Mansilla, enfermero de un servicio privado de ambulancias, es acusado de robar fentanilo del Hospital Internazonal General de Agudos doctor Diego Paroissien en La Matanza. La detención se realizó luego de observar las cámaras que lo captan llevándose tres ampollas de 10 mililitros de dicha droga, por lo que ahora quedó imputado por "delito de hurto agravado".
Las alertas comenzaron cuando descubrieron que faltaba este opioide sintético, conocido por tener una potencia mucho mayor a la morfina. Tras las primeras averiguaciones, dieron con que la persona detrás del robo se trataba del enfermero, de 45 años. Las cámaras lo muestran vestido con un ambo de color verde, llevándose la droga.
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Luego de estas imágenes, el personal policial realizó un allanamiento de urgencia en su domicilio, ubicado en Estrada 2682, entre Alcaparras y Lacar, en Rafael Castillo. Allí hallaron las tres ampollas de 10 mililitros y otros medicamentos.
La fiscal Evangelina Sánchez, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°11 de La Matanza, es quien estará a cargo de la causa.
Qué es el fentanilo
Conocido por ser un fármaco opiáceo sintético aprobado para su uso analgésico y anestésico, la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos lo define como "100 veces más potente que la morfina y 50 veces más potente que la heroína".
Existen dos tipos: el fentanilo farmacéutico, que es el recetado por personal de salud para tratar dolores intensos, especialmente después de una operación y en tratamientos cancerígenos; y el fentanilo fabricado ilícitamente, que es el que ha generado las muertes por sobredosis recientes.
Entre los efectos que genera su consumo, se encuentran: relajación, euforia, alivio del dolor, sedación, confusión, somnolencia, mareos, náuseas y vómitos, retención urinaria, constricción pupilar y depresión respiratoria.
La también llamada "droga zombie", llegó a cobrarse más de 100.000 muertes por sobredosis en solo un año en Estados Unidos. Ya en el 2024, la Defensoría del Pueblo bonaerense advirtió sobre el riesgo de un aumento en el consumo de esta droga altamente adictiva y potencialmente fatal en nuestro país: “El impacto del fentanilo en América y Argentina es una seria amenaza para la salud pública y la seguridad. Es imperativo que gobiernos, organizaciones internacionales y comunidades trabajen en conjunto para implementar estrategias integrales que aborden la producción, distribución y prevención del fentanilo”.
“El problema que tiene Argentina con el fentanilo es que, a diferencia de Estados Unidos, aquí se lo utiliza para mezclarlo con otras sustancias, especialmente con cocaína o éxtasis, dado a su alto costo, lo cual aumenta el nivel de adicción y lo vuelve más peligroso”, explicó Walter Martello, defensor del Pueblo Adjunto de la provincia de Buenos Aires y responsable del Observatorio de Adicciones y Consumos Problemáticos, en diálogo con El Destape, haciendo referencia a que algunos jóvenes pueden consumir esta sustancia sin saberlo.
El fentanilo, a menudo mezclado con otras drogas como la metanfetamina, éxtasis y cocaína amplifica el riesgo de muerte, ya que requiere de dosis más pequeñas para inducir efectos narcóticos, lo cual aumenta la dificultad de la desintoxicación y la rehabilitación.
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