Lo tenés en tu cocina y puede prevenirte problemas cardíacos: el condimento que es una bendición

Existe un condimento que seguramente tenés en tu cocina y que podría salvarte la vida. Esta especia, utilizada ancestralmente por varias culturas alrededor del mundo, es ideal para prevenir problemas cardíacos y proteger el corazón de manera totalmente natural. Se caracteriza por su aroma, su color y su sabor delicioso, aunque no solamente sirve para darle un toque extra a las comidas, sino que también es utilizada en la medicina alternativa por sus magníficas propiedades para la salud.

Se trata de la cúrcuma, una especia muy completa que tiene propiedades sanadoras para diferentes afecciones, especialmente para el corazón. Esto se debe a un compuesto activo presente en la cúrcuma, la curcumina, que según estudios científicos, puede prevenir enfermedades del corazón y otros riesgos asociados. Tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que previenen y combaten la inflamación crónica y el daño celular, y de esta manera, protegen al corazón.

Además, la cúrcuma ayuda a reducir los niveles de colesterol LDL, conocido como "colesterol malo" y los triglicéridos en sangre, reduciendo el riesgo de aterosclerosis, una condición en la que las arterias se obstruyen debido a la acumulación de placas de grasa. Además, esta especia mejora la función endotelial, contribuyendo a mantener un flujo sanguíneo saludable y reducir el riesgo de hipertensión y enfermedades cardiovasculares.

Otros beneficios de la cúrcuma para la salud

• Protege el cerebro: según algunos estudios, la cúrcuma aumenta los niveles de factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF), una proteína que está involucrada en el crecimiento y la supervivencia de las células cerebrales. Se cree que esto podría mejorar la función cerebral y prevenir las enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.

• Tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes: el compuesto curcumina, presente en la cúrcuma, reduce la inflamación general del cuerpo, reduce el estrés y alivia los dolores físicos, como la artritis. 

• Previene enfermedades crónicas y envejecimiento prematuro: la curcumina también tiene un antioxidante natural que ayuda a combatir el daño celular. Como consecuencia, esto puede prevenir enfermedades crónicas y el envejecimiento prematuro.

• Prevendría el cáncer: algunos estudios demostraron que la cúrcuma podría tener propiedades anticancerígenas, ya que inhibiría el crecimiento de células cancerosas y prevendría la formación de tumores. Sin embargo, aún no hay suficiente información como para confirmar esto. 

• Alivia los síntomas digestivos y protege el hígado: la cúrcuma alivia la indigestión y la inflamación del tracto gastrointestinal. Además, mejora la función hepática ya que aumenta la producción de enzimas antioxidantes en el hígado.

• Fortalece el sistema inmunológico: la curcumina aumenta la producción de células que combaten las infecciones y enfermedades, por lo que el consumo de esta especia resulta muy beneficioso para el sistema inmunológico.

Cómo consumir la cúrcuma

• En platos salados: la forma más tradicional de consumir cúrcuma es en platos salados, como platos con curry, arroz, pollo, pescado, vegetales o sopas. 

• Leche dorada: la leche dorada es una muy buena opción para consumir cúrcuma. Esta bebida se hace con leche (de vaca o vegetal), cúrcuma, canela, jengibre, una pizca de pimienta negra y miel. 

• En infusiones: la cúrcuma se puede consumir en infusiones, como café o té. Para esto, deberás añadir una pequeña pizca de cúrcuma en polvo. Se recomienda combinarla con limón, miel y jengibre. En caso de tolerarlo, es ideal agregarle una pizca de pimienta, ya que aumenta la absorción de la curcumina. 

• En comidas cocinadas al horno: la cúrcuma se le puede agregar a preparaciones al horno, como panes, tortas, galletitas o budines. En este caso, se puede combinar con otras especias, como nuez moscada o canela.

• En batidos: se le puede agregar una cúrcuma en polvo a los batidos de frutas (como batido de banana, frutilla, mango, ananá), ya sea con leche o con agua.

• En ensaladas: la cúrcuma se puede agregar a ensaladas con jengibre rallado. Además, se puede hacer una mezcla de cúrcuma, aceite de oliva, mostaza y miel para crear un aderezo para las ensaladas.

• En suplementos: si no te convence ninguna de estas alternativas, podés comprar suplementos de cúrcuma, que generalmente vienen en forma de cápsulas.