La oposición de la Ciudad de Buenos Aires cuestionó a la gestión de Jorge Macri, que había anunciado que los contenidos relacionados a la Educación Sexual Integral (ESI) habían quedado bajo "revisión exhaustiva" y iban a ser estudiados de manera "neutral". Tras esta repercusión, la vicejefa de Gobierno, Clara Muzzio, justificó la "revisión exhaustiva" de la ESI y argumentó que encontraron "contenidos obsoletos" y material que no era "visto por nadie".
En un largo mensaje a través de Twitter, la titular de la Legislatura porteña comenzó comentando que "en el último trimestre de 2024" mantuvieron "una serie de reuniones con padres que se habían organizado para manifestar su preocupación por contenidos que estaban recibiendo sus hijos en el contexto de ESI".
"Como corresponde, escuchamos las opiniones e hicimos un primer análisis sobre los contenidos oficiales publicados en la web. Encontramos desorden y documentos obsoletos que venían desde la sanción de la ley en el año 2006", indicó.
Muzzio señaló que "se tomó entonces la decisión de revisar de manera exhaustiva y neutral los contenidos de ESI en la ciudad durante el receso escolar", lo que derivó en que aparecieran "en las redes y en comentarios de algunos periodistas alineados con el kirchnerismo o la izquierda críticas indignadas y acusaciones infundadas de censura".
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"Todo fuera de lugar", opinó la Vicejefa de Gobierno, que sostuvo, primero que "dentro de los contenidos digitales que se desactivaron para su revisión, existían algunos que venían de la época en que (Jorge) Telerman fue intendente (Sic.), archivos que ya nadie sabía por qué estaban ahí y que no se ajustaban a ninguna curricula"
Luego, señaló que "los contenidos que se bajaron registraban 73 visitantes únicos en el último trimestre, incluyendo al administrador y al propio equipo de revisión", por lo que "todo el material ya no era visto por nadie".
Fue así que Muzzio explicó "por qué bajamos los contenidos". "Como si fuese una biblioteca que llevaba mucho tiempo sin limpiar ni clasificar, la forma ordenada de revisarla es la que hicimos. Por eso usamos la palabra exhaustiva, que tantos comentarios prejuiciosos produjo. Problemas parecidos a los nuestros tiene, por ejemplo, el gobierno nacional que tiene materiales de la época de Néstor Kirchner", comparó.
"La ESI es un contenido que excede la Educación Sexual; abarca campos de la vida de la sociedad, de la intimidad de los estudiantes, incluso de los más chicos (desde los 4 años). Por supuesto, todos los contenidos que van más allá de la ciencia biológica tienen que ser permanentemente revisados. Lo que no es ciencia es dogma, y los dogmas son anticientíficos", continuó.
Por último, afirmó que van a "revisar todos los contenidos", así como "la forma en que los padres se informan sobre lo que sus hijos reciben y los procedimientos para que puedan objetar cualquier contenido que consideren fuera de lugar"
"Buscaremos tener un análisis neutral, actualizado, profundo y profesional. El proceso y los resultados de ese análisis serán transparentes", cerró.
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