El mundo de la astronomía y el espacio exterior está en shock por el asteroide que podría impactar con el planeta Tierra en 2032, de acuerdo a la revelación hecha por los expertos en este tema. Los especialistas siguen de cerca el tema y evalúan qué podría pasar en el futuro cercano.
La NASA actualizó sus estimaciones y ahora calcula en un 3,1% la probabilidad de que el asteroide 2024 YR4 choque con la Tierra. Este porcentaje ya supera el 2,7% que en 2004 se había proyectado para el asteroide Apofis, aunque finalmente su riesgo de impacto se redujo a cero. La Agencia Espacial Europea (ESA), por su parte, también ha ajustado sus cálculos al alza, elevando la probabilidad de impacto hasta el 2,8%. A comienzos de febrero, este riesgo se situaba en torno al 1,2%, pero nuevas observaciones han permitido precisar la estimación tras una semana en la que la luna llena dificultó el análisis.
El seguimiento de la trayectoria del asteroide, cuyo diámetro se estima en unos 50 metros, es constante por parte de la Oficina de Defensa Planetaria de la ESA. Según su coordinador, Juan Luis Cano, la posibilidad de impacto " va a seguir subiendo" en las próximas dos semanas. La incertidumbre sobre su trayectoria ha disminuido un 50% y ahora se concentra en un corredor que abarca aproximadamente un millón de kilómetros de ancho, con la Tierra aún cerca del centro de esa zona. Al reducirse las dimensiones de dicho corredor, la proporción que ocupa nuestro planeta dentro de él es mayor, lo que incrementa la probabilidad de colisión. Cano señala que este comportamiento es esperable y que las probabilidades seguirán en ascenso hasta que la Tierra quede fuera del corredor, tal como ocurrió con Apofis.
La observación desde telescopios terrestres aún disponibles no parece suficiente para excluir a la Tierra de la zona de incertidumbre, admite Cano. En este contexto, el Telescopio Espacial James Webb, ubicado a 1,2 millones de kilómetros de distancia, se perfila como la mejor opción. Se espera que en la primera semana de marzo este telescopio observe el 2024 YR4, permitiendo reducir la incertidumbre sobre su tamaño, estimado actualmente entre 40 y 90 metros de diámetro.
Cómo son las previsiones del impacto del asteroide en la Tierra
A pesar de estas proyecciones, la ESA mantiene su previsión de que hay un 90% de probabilidades de descartar cualquier impacto antes de que el asteroide deje de ser visible a principios de mayo. Si esto no ocurre, habrá que esperar hasta 2028 para conocer con certeza si se producirá una colisión en 2032.
En la escala de Turín, que mide el riesgo de impacto en una escala del 0 al 10, el 2024 YR4 ha sido clasificado con un nivel tres. Apofis, debido a su mayor tamaño de 375 metros de diámetro, llegó a alcanzar el nivel cuatro en su momento. Si se confirmara que el 2024 YR4 mantiene su trayectoria de impacto, su clasificación pasaría directamente al nivel ocho, lo que indicaría prácticamente un impacto inevitable