Este último día de 2024 vence el congelamiento de las dietas de los senadores, votada en el recinto en agosto. En ese momento, el Senado tuvo que apurar esta medida ante los cuestionamientos que tuvo la Cámara alta, principalmente, la vicepresidenta Victoria Villarruel.
La presión volvió a surgir ahora con el fin del congelamiento. Al ya conocido hostigamiento del presidente Javier Milei y sus funcionarios de paladar negro a Villarruel, el bloque oficialista de senadores de La Libertad Avanza (LLA) y el de la Unión Cívica Radical (UCR) pidieron de forma institucional a la Vice resignar el aumento.
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Ante la consulta de El Destape, desde las inmediaciones de la Vicepresidenta no dieron precisiones sobre si avanzarán en un nuevo congelamiento por sesión o por decreto. "Seguimos igual por ahora", indicaron.
Sin embargo, con motivo del fin de año, Villarruel publicó en sus redes sociales sus saludos. Frente a la consulta de un usuario, la Vice respondió "a mi pedido, ya lo solicitaron ante el Senado".
A comienzos de esta semana, el bloque de LLA presentó una nota en la que dejaron manifiesta su "expresa voluntad de no percibir aumento alguno en las dietas de los senadores hasta que se trate todo este asunto en las sesiones ordinarias de 2025". El texto continúa indicando que "se extienda la suspensión de aumentos dispuesta por la resolución DR27/24, que concluye el 31 de diciembre de este año".
La nota fue firmada por el vicepresidente de la bancada oficialista, Bruno Olivera, y contó con la adhesión de los restantes miembros del bloque: Ezequiel Atauche, Bartolomé Abdala, Juan Carlos Pagotto, Ivana Arrascaeta y Vilma Bedía.
Por su parte, el bloque de la UCR en el que señalaron que los senadores boinas blancas tienen "la firme voluntad de no percibir aumentos en nuestras dietas, considerando la caducidad de la DR27/24"
"Es lamentable como se manipula y desinforma respecto a este tema, utilizando como instrumento de desprestigio, ante uno de los poderes públicos de la Nación que son fundamentales para la consolidación de la democracia e indispensables para el control de los abusos que hemos vivido ya en otros momentos de la historia", continuó el texto con el firma del titular de la bancada, Eduardo Vischi.
Y concluyó: "Es por ello que solicitamos tenga a bien considerar la prórroga del congelamiento de las dietas, hasta tanto podamos discutir la cuestión en el pleno de nuestro cuerpo".
Si bien queda tiempo en el verano para retrotraer el aumento, dirigentes mileistas comenzaron a presionar a la Vice para que vuelva a frenar el aumento. De no retrotraerse, los salarios de los legisladores de la Cámara alta podrían pasar de 4,5 millones a más de 9 millones de pesos.
Una agenda trabada
Villarruel intentó convocar a sesión especial para votar un nuevo congelamiento, pero no tuvo eco. También circuló la versión de que podría avanzar en una suspensión del aumento por decreto de la Presidencia de la Cámara.
En el momento en el que la Cámara de Diputados había anunciado un aumento a los trabajadores de planta en base al "ahorro" de gastos, la propia Vice salió a despegarse. En una interacción con un usuario de Twitter, dijo que su "sueldo está congelado desde el año pasado".
"No soy senadora por lo que no decido sobre sus elecciones en el recinto el cual es diferente en sus reglas a la Cámara de Diputados. Dicho esto Feliz Navidad y que el 2025 te encuentre con más sabiduría que este que se va", respondió la titular del Senado.
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La acción de los senadores oficialistas fue adelantada por el presidente Provisional del Senado, Bartolomé Abdala, que había considerado que no era "el momento oportuno" para el aumento. Según había señalado, dentro del oficialismo analizaban “cuál es el mejor mecanismo administrativo que pueda resolver” este tema y, si no, “se hará mediante una sesión”.
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