¿Fin de la alianza? Se profundiza la guerra entre LLA y el PRO en Buenos Aires

El acuerdo entre ambos partidos, en principio, fue solo electoral y la convivencia a un mes y medio de haber ido a las urnas se mostró conflictiva. Los libertarios acusan a los amarillos de pactar con el peronismo a cambio de cargos, mientras que los macristas señalan a los violeta por romper la alianza y votar en contra de sus intendentes.

11 de diciembre, 2025 | 00.31

La guerra bonaerense entre el PRO y La Libertad Avanza no cesa. Desde filas libertarias, se profundizó el mensaje contra sus socios amarillos, acusándolos de mantener viejas prácticas de la política. La alianza que formaron para las elecciones pareció llegar a su fin una vez que éstas concluyeron.

Los primeros roces surgieron cuando la provincia de Buenos Aires aprobó su ley de endeudamiento, y la críticas se intensificaron durante la elección de autoridades en el Concejo Deliberante de Bahía Blanca. En ambos casos, desde La Libertad Avanza acusaron al PRO de haber pactado con el peronismo, dándole sus votos a cambio de cargos.

Como viene contando El Destape, el PRO no reaccionó bien ante estas impugnaciones y respondió de manera discreta, sin enfrentamientos públicos pero con contundencia. Por el momento, los amarillos decidieron no confrontar abiertamente con sus socios, pero ese momento podría llegar si la situación no empieza a modificarse.

En Bahía Blanca, La Libertad Avanza decidió no ponerle freno a la disputa. Oscar Liberman, legislador bonaerense y ex candidato a intendente de esa ciudad, expresó en una entrevista su enojo por la actitud del PRO de acordar con el peronismo “para aumentarles impuestos a los bahienses y desplazar al mejor presidente que tuvo nuestro Concejo Deliberante son prácticas que vinimos a cambiar”.

El mismo dirigente participó y difundió una nota de Clarín con el mismo mensaje: la supuesta decisión del PRO de Cristian Ritondo de romper la alianza con LLA tras pactar con el peronismo, impulsar un paquete fiscal y votar cambios en el Concejo Deliberante para desplazar al libertario Mauro Reyes de la presidencia y colocar en su lugar a la PRO Gisela Caputo.

“Los que destruyen son ellos. En nuestros distritos nos votan en contra”, aseguran en el PRO. No faltan ejemplos. A los mencionados ayer en esta nota se le sumó otra batalla, esta vez en Pinamar, donde los violeta quisieron quedarse con la presidencia del Concejo Deliberante pero terminó en manos amarillas.

El oficialista Matías Rapallino fue propuesto para comandar el órgano municipal ya que, como cabeza de la lista de concejales que ganó en las urnas, le correspondía ese lugar por tradición. Sin embargo, en la sesión preparatoria del 5 de diciembre, el tercer candidato de su lista, el libertario José Luis Arata, presentó una propuesta alternativa con el violeta Daniel Jouffré al frente, que no fue electo en los comicios de este año. Finalmente, la votación terminó validando la opción de Rapallino.

En Pinamar, el Concejo Deliberante está partido entre la opción PRO – LLA y el peronista. De los municipios gobernados por el partido amarillo, sólo allí comparten bloque con los violeta, mientras que en los demás mantienen sus identidades separadas. Sin embargo, en otros distritos bonaerenses ambas fuerzas conformaron un espacio parlamentario conjunto, especialmente en aquellos en los que La Libertad Avanza tiene poca presencia.

Por ahora, la actitud del PRO es la de no confrontar abiertamente los libertarios, pero sí quiere dejar en claro que la decisión de erosionar la alianza es exclusiva de LLA, que mantiene una actitud destructiva. En esta línea se sostuvo que, en principio, la alianza con los violeta fue sólo electoral.

Desde el PRO sostienen que La Libertad Avanza no está jugando como corresponde, operando desde las sombras para destruir o vaciar al espacio político que le brindó gobernabilidad en los primeros dos años de gestión, etapa en la que mostraron poca experiencia y notoria debilidad. Pero también cuando el candidato bonaerense puesto por Javier Milei, José Luis Espert, tuvo que renunciar por sus vínculos con el narcotráfico y los amarillos encabezaron una campaña imposible.

La ex diputada María Eugenia Vidal, publicó un balance de estos dos años en esa misma línea. Destacó avances económicos y en el orden del espacio público, pero subrayó que “no hubieran sido posibles sin el acompañamiento del PRO” .

En una nota publicada en Infobae, la líder de la Fundación Pensar afirmó que en los próximos dos años el PRO debe recuperar su identidad para volver a ser competitivo para enfrentar al populismo. “Esto significa seguir apoyando con firmeza cada reforma económica que premie la inversión, el esfuerzo y el trabajo. Pero también marcar las diferencias y los errores, de manera de defender a los argentinos y que el gobierno no se desvíe del rumbo”, sostuvo.