El presidente Javier Milei se burló de quienes lo critican por estar involucrado en una mega estafa cripto internacional y vinculó a sus opositores con personas que supuestamente no sabían llenar el formulario para cobrar el Ingreso Familiar de Emergencia. Mientras la repercusión mundial se acrecienta, el jefe de Estado opta por reírse en sus redes sociales.
"No sabían llenar el formulario IFE en pandemia y ahora son todos expertos en criptomonedas", señaló el posteo que compartió Milei en su cuenta personal de la red social Instagram. Es extraño que el mandatario casi trate de analfabetos a quienes los critican por haber promocionado un proyecto cripto que derivó en una estafa cuando él mismo se declaró un ignorante en la materia. Aún así, no es la primera vez que da consejos sobre economía financiera digital.
Milei llega a Estados Unidos en medio del escándalo
En medio del escándalo cripto, Milei llegó este jueves a Washington, en su noveno viaje a Estados Unidos, para participar de una nueva edición de la Conferencia de Acción Conservadora (CPAC) y reunirse con Elon Musk, en calidad de flamante funcionario, y con la titular del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva.
El vuelo especial que trasladó a la comitiva presidencial aterrizó a minutos de las 10.30 a la Base de la Fuerza Aérea Andrews, ubicado en el estado de Maryland. El mandatario viajó en compañía del ministro de Economía, Luis Caputo, el vocero presidencial, Manuel Adorni, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei y allí, los esperaba el canciller, Gerardo Werthein, para sumarse a la delegación.
Como primera actividad, este jueves a las 17 volverá a encontrarse con el director del Departamento de Eficiencia de la gestión de Donald Trump, con la intención de sumar un nuevo encuentro a los tres previos que protagonizaron.
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A las 19, hará lo propio en las oficinas del organismo de crédito la titular del fondo, Kristalina Georgieva. Se espera la presencia del titular del Palacio de Hacienda en el intercambio que encabeza las negociaciones por el diseño de un nuevo acuerdo al que, el mandatario, anticipó solo "le falta el moño". Aún así, ese entendimiento deberá ser aprobado por el Congreso.
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