Trabajadores autoconvocados de la cerealera Vicentin cortaron esta mañana la autopista Rosario-Santa Fe en reclamo de salarios adeudados. Recientemente, la empresa había anunciado el pago de solo el 30% del sueldo de febrero para casi un millar de empleados. Las plantas de la firma se encuentran actualmente paralizadas.
El nutrido grupo de trabajadores se concentró en el ingreso de la planta agroexportadora, sobre la ruta A012 entre las localidades de Ricardone y San Lorenzo, para luego marchar casi 2 kilómetros por la colectora de esta vía hacia la autopista que une las ciudades de Rosario y Santa Fe. Al arribar, los manifestantes realizaron un corte total de esa autopista mano a Rosario, según indicó el medio local La Capital.
Los trabajadores le reclaman a Vicentin, actualmente en convocatoria de acreedores, el pago total de los sueldos adeudados. "Debido a la critica situación financiera por la que atraviesa actualmente, se ve imposibilitada de afrontar el pago de la totalidad de los haberes”, indicó la empresa en los últimos días.
Por su parte, el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (Soea) de San Lorenzo exigió que la agroexportadora pague los sueldos y lanzó una medida de fuerza que mantuvo paralizados los principales puertos exportadores de Argentina.
Sin embargo, este miércoles, tras una audiencia entre los gremios y autoridades de la Secretaría de Trabajo de Nación, la medida se levantó, a excepción de los plantas de Vicentin ubicadas en San Lorenzo y Ricardone, y también en la fábrica Renopack, una envasadora de aceite del mismo grupo. Morales confirmó que las medidas continúan en estas empresas porque los trabajadores cobraron solo una parte del salario y "no les quedó un peso", por lo que "no tienen para darle de comer a los hijos".
En tanto, la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara), que pidió la conciliación obligatoria por 15 días y el Ministerio de Capital Humano se la otorgó, emitió un comunicado en el que "expresa su profundo rechazo a la decisión sindical de paralizar todas las actividades de la industria aceitera y exportadora del país por un conflicto sindical del que resulta absolutamente ajeno".
La preocupación de las autoridades locales
El intendente de San Lorenzo, Leonardo Raimundo, dijo estar "muy preocupado" por el impacto social de la crisis de Vicentín. “Hablamos de que hay mil trabajadores, entre directos e indirectos, involucrados. Y no es un tema menor que haya tanta gente sin cobrar el sueldo. La crisis tiene un alto impacto y no se puede permitir su quiebra. Siempre le digo a los comerciantes, que seguro 1 de cada 10/12 personas que entran a su negocio a comprar tienen alguna vinculación con Vicentín”, explicó esta mañana en diálogo con el medio local Radio 2.