El enviado de la ONU para Siria instó a una transición inclusiva basada en una resolución de nueve años de antigüedad del Consejo de Seguridad, durante una reunión con el comandante de la nueva administración siria, Ahmed al-Sharaa, informó el lunes la oficina del enviado.
La Comandancia General siria, en un comunicado separado sobre la reunión del domingo con Geir Pedersen, de la ONU, dijo que habían discutido la necesidad de revisar la Resolución 2254 del Consejo de Seguridad, diciendo que necesitaba ser actualizada para "adaptarse a la nueva realidad".
La reunión supuso uno de los encuentros internacionales más significativos hasta la fecha para Sharaa, líder del grupo islamista Hayat Tahrir al-Sham (HTS), que se ha erigido en el poder en Damasco desde el derrocamiento de Bashar al-Asad hace poco más de una semana.
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Las fotos de la reunión mostraron a Sharaa, cuyo grupo fue afiliado de Al Qaeda hasta que rompió lazos con la red yihadista en 2016, vistiendo un blazer y una camisa abierta mientras se reunía con Pedersen, el enviado de la ONU para Siria desde 2018.
HTS está designado grupo terrorista por potencias occidentales y regionales, incluida Turquía, que durante mucho tiempo había sido uno de los principales apoyos internacionales de la oposición siria.
La nueva administración en Damasco ha expuesto pocos detalles sobre su pensamiento para los próximos pasos para Siria, que está saliendo de más de cinco décadas de férreo gobierno de la familia Asad y casi 14 años de devastadora guerra civil.
El recién nombrado primer ministro Mohammed al-Bashir, que anteriormente dirigió un gobierno afiliado al HTS en la provincia de Idlib, ha dicho que permanecerá en el cargo hasta marzo.
Pedersen informó a Sharaa de los resultados de una reunión internacional convocada en Jordania el sábado, según el comunicado de su oficina.
"El Enviado Especial informó sobre el resultado de la Reunión Internacional de Aqaba (...) haciendo hincapié en la necesidad de una transición política creíble e inclusiva dirigida y de propiedad siria basada en los principios de la resolución 2254 (2015) del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas", dijo un comunicado de la oficina de Pedersen.
"El Enviado Especial subrayó la intención de las Naciones Unidas de prestar toda la asistencia al pueblo sirio".
La Resolución 2254 de la ONU ha surgido como un punto focal de la diplomacia sobre Siria desde que Asad fue derrocado y huyó a Rusia.
Se aprobó en 2015 en el punto álgido del conflicto que se desató a raíz de las protestas prodemocráticas contra el gobierno de Asad en 2011. La resolución se aprobó después de que Rusia interviniera militarmente del lado de Asad, apuntalando su gobierno.
La resolución declara su apoyo a un proceso político liderado por Siria y facilitado por Naciones Unidas que, en un plazo de seis meses, establezca "un gobierno creíble, inclusivo y no sectario y fije un calendario y un proceso para redactar una nueva Constitución".
Además, expresa su apoyo a la celebración de elecciones libres y justas, en el marco de la nueva constitución, en un plazo de 18 meses.
Sharaa "subrayó la importancia de una cooperación rápida y eficaz para abordar los problemas de los sirios y la necesidad de centrarse en la unidad de los territorios de Siria, la reconstrucción y la consecución del desarrollo económico", según el comunicado sirio.
(Reporte adicional de Clauda Tanios en Dubai, Hatem Maher y Ahmed Tolba en El Cairo; Escrito por Tom Perry. Editado en español por Natalia Manuel Ramos)
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