COVID-19: Bolsonaro usó al ejército para repartir remedios desaconsejados por expertos

Desde la Comisión Parlamentaria de Investigación quieren citar al presidente Bolsonaro para que declare sobre esta medida. "Si no les gusta, pueden votar a Lula", disparó enojado.

26 de mayo, 2021 | 20.40

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, utilizó al ejército de su país para repartir remedios y medicamentos que no son recomendados y hasta, en algunos casos, contraindicados por los expertos para combatir al COVID-19 durante la pandemia. El vicepresidente Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI), Randolfe Rodríguez, presentó un pedido para citarlo a declarar. De todas maneras, es algo improbable ya que depende del apoyo de la mayoría.

Por el momento, dicha comisión no votó sobre la convocatoria a declarar del presidente pero sí se comunicó con 10 gobernadores, de los diferentes partidos, buscando analizar la narrativa gubernamental en relación a la entrega de equipamiento y dinero en hospitales para estados y municipios. Más allá de todo, la principal investigación pasa porque desde el Gobierno buscaron usar un remedio contra la malaria, llamado cloroquina, como forma ilusoria de prevención. Uno de los testimonios clave proviene, nada más y nada menos, que del general Eduardo Pazuello, ex ministro de Salud.

El jefe de Estado del país vecino no dudó en demostrar su molestia por la situación y bromeó ante sus seguidores: "No soy negacionista ni terraplanista". Incluso, defendió públicamente la utilización de la cloroquina y hasta incluso dijo que la tomó cuando tuvo coronavirus. Según se informó desde el Ejército, por orden del Ministerio de Salud, se distribuyeron más de 2,9 millones de comprimidos como acción frente a la enfermedad.

Además, tal como lo indican los registros, durante el 2020 se distribuyó 11 veces más cantidad de cloroquina que en años anteriores y el laboratorio que produce dicho remedio aseguró que recibió indicaciones gubernamentales ya que se trataba de un remedio utilizado como "terapia que ayuda a las formas graves de COVID-19", a pesar de que esto no sea cierto o, por lo menos, no esté comprobado.

La gran crítica general pasa porque se buscó prevenir con un remedio no recomendado mientras la concentración no se mantuvo en la compra y desarrollo de vacunas, camas de terapia intensiva y el suministro de oxígeno medicinal. Dejando en claro su bronca, ante las quejas de sus seguidores frente a nuevas cuarentena -por la tercera ola del virus- y la situación económica actual, disparó: "Si no les gusta, pueden votar a Lula en 2022".

Pandemia: nueva cepa de COVID en San Pablo

Brasil es el país con más muertos a causa del coronavirus y el tercero que tiene más contagios en la actualidad. Es uno de los grandes epicentros de la pandemia y su situación no solo preocupa en la región, sino también en el resto del mundo. Ahora, como si esto fuera poco, científicos anunciaron el descubrimiento de una nueva cepa identificada en 21 municipios de San Pablo. Se trata de uno de los estados más afectados, con más de 450 mil decesos.

Desde la Sociedad Brasileña de Virología (SBV) la llamaron mutación P.4 y confirmaron que posee la mutación L452R en la proteína 'spike', también presente en la variante india (B.1.617). Si bien no hay data oficial, los investigadores creen que dicha mutación proviene de la cepa Manaos, considerada "preocupante" por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se desconoce si es más transmisible.