El Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) informó el martes de que había detenido a un ciudadano ruso-alemán con doble nacionalidad sospechoso de preparar un acto de sabotaje en un ferrocarril de Nizni Nóvgorod, ciudad situada a unos 450 kilómetros al este de Moscú.
El FSB no reveló la identidad del hombre, pero informó que nació en 2003. Indicó que las autoridades habían encontrado un artefacto explosivo improvisado en su domicilio, así como pruebas de que había mantenido correspondencia con un miembro de los servicios especiales ucranianos.
La inteligencia militar y los servicios de seguridad del Estado ucranianos no respondieron inmediatamente a las peticiones de comentarios.
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Las autoridades rusas han vinculado a grupos de sabotaje proucranianos numerosos ataques a vías férreas destinados a interrumpir el suministro hacia el frente de batalla en Ucrania desde que comenzó la guerra en febrero de 2022.
La agencia de espionaje nacional de Ucrania también ha sido acusada de detonar explosivos en líneas ferroviarias dentro de Rusia.
El medio de noticias militar ruso Zvezda publicó el martes un vídeo en el que supuestamente se veía al hombre ruso-alemán, cuyo rostro aparecía difuminado, confesando el crimen. No estaba claro si el hombre había confesado bajo coacción.
En el vídeo decía que había llegado a Rusia en 2023 y que había conocido por internet a un hombre llamado Artyom, que resultó ser "un miembro de los servicios especiales ucranianos".
El detenido dijo que el hombre le pagó para que prendiera fuego a una caja de fusibles y dibujara pintadas proucranianas. "La última tarea que me propuso fue hacer explotar, bueno, descarrilar un tren, un tren de mercancías", dijo el hombre en el vídeo.
El FSB informó que se ha abierto un caso penal en su contra. También señaló que había detenido a otras personas junto con el ciudadano ruso-alemán, aunque no proporcionó detalles sobre ellas.
El Ministerio de Asuntos Exteriores alemán no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
El mes pasado, el FSB detuvo al ciudadano alemán Nikolái Gaiduk como sospechoso de contrabando de explosivos y terrorismo, acusándolo de hacer estallar una tubería en una estación de distribución de gas en el exclave ruso de Kaliningrado, en el mar Báltico, a principios de este año.
(Reportaje de Reuters; redacción de Lucy Papachristou; edición de Guy Faulconbridge y Mark Trevelyan; edición en español por Jesús Calero)
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