El presidente del directorio de Petroperú, Alejando Narváez, dijo el miércoles a Reuters que se podría considerar ofertar una participación minoritaria de la empresa a inversionistas privados en el segundo semestre de 2025, cuando la estatal espera salir de una crisis y registrar utilidades.
Narváez, que fue designado a inicios de mes, afirmó asimismo que, ante la preocupación de acreedores que conversaron con él, no tiene previsto solicitar un nuevo financiamiento por parte del Estado peruano durante su gestión.
El ejecutivo dijo que ha puesto en marcha varias acciones para alcanzar utilidades de entre 200 millones y 250 millones de dólares el próximo año, para así revertir las pérdidas registradas desde 2022 y las que se estiman también para este año.
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En una entrevista en su oficina, Narváez dijo que las pérdidas estimadas para este año, calculadas por la anterior gestión de la empresa, ascienden a unos 960 millones de dólares, pero espera reducir esa cifra "por lo menos (en) 100 millones".
"Nadie compra la acción de una empresa que tenga abultadas pérdidas", manifestó.
"Podríamos pensar en el segundo semestre del próximo año ya empezar a ofertar esas acciones que están de hecho registradas en la bolsa de valores", dijo.
"Seria gradual (…) le mentiría si le digo que va ser 10% a 20%, veremos cómo se van desenvolviendo los acontecimientos”, agregó.
Petroperú perdió en 2022 su grado de inversión de las agencias calificadoras debido a una crisis tras una inversión de 6.500 millones de dólares para modernizar su refinería Talara.
El Gobierno lanzó en septiembre un nuevo salvavidas a Petroperú de 1.750 millones de dólares, que incluye una capitalización y una garantía de endeudamiento. También dijo que asumirá un préstamo garantizado de 800 millones de dólares que el banco estatal le otorgó a la petrolera a inicios de 2024.
"La preocupación que tienen (los bonistas y acreedores) es que si vamos a seguir pidiendo más financiamiento por parte del Estado", dijo Narváez, quien tuvo una conferencia telefónica el miércoles más temprano con los bonistas.
"Mientras que yo este aquí haré esfuerzos denodados para que eso no sea así, porque esos dineros podrían tranquilamente ser invertidos en programas sociales", manifestó.
DESCARTA BONOS
La petrolera tiene como acreedores a bonistas por dos emisiones en el mercado internacional, por unos 3.000 millones de dólares, que sirvieron para financiar Talara. Asimismo tiene una deuda con un grupo de bancos extranjeros por 1.300 millones de dólares, garantizado por la agencia española CESCE.
El ejecutivo dijo que no se tiene problemas con los bonistas y que la empresa está asumiendo y "pagando los intereses puntualmente".
Narváez reconoció que actualmente la estatal tiene problemas de liquidez para asumir sus operaciones. "Como tenemos un capital de caja negativo bastante importante, entonces eso necesita liquidez y hay que buscar posibles prestamistas".
A la pregunta de si se considera una nueva emisión de bonos, respondió: "no de momento, eso está descartado".
Petroperú, que alguna vez fue un importante productor de crudo, ha visto estancada el bombeo y está centrando sus esfuerzos en su refinería de Talara, que tiene una capacidad para refinar hasta poco más de 95.000 barriles por día.
Narváez dijo que espera que para fin de año Talara eleve su producción hasta su capacidad total, desde los aproximadamente 70.000 bpd actuales, y que recupere su participación en el mercado. Para el 2025 el plan es tener una participación del 38% del mercado, frente al 28% previsto este año, refirió.
El ejecutivo afirmó que planea mantener conversaciones con sus vecinos Ecopetrol de Colombia y Petroecuador de Ecuador para la posible compra de crudo para su refinaría Talara.
Desde la década de 1990 Petroperú sólo se dedicaba a la refinación y comercialización de combustibles después de su privatización. Ahora ha comenzado a producir crudo en cuatro lotes que estaban siendo explotados por privados y volvieron a manos del Estado después que los contratos expiraron en el 2023.
Con información de Reuters