El ejército israelí emitió nuevas órdenes de evacuación para los residentes en zonas de un suburbio del este de la ciudad de Gaza, desencadenando una nueva ola de desplazamientos el domingo, y el director de un hospital de Gaza resultó herido en un ataque israelí con drones, informaron médicos palestinos.
Las nuevas órdenes para el suburbio de Shejaia publicadas por el portavoz del ejército israelí en X el sábado por la noche fueron atribuidas a militantes palestinos que disparaban cohetes desde ese distrito densamente urbanizado del norte de la Franja de Gaza.
"Por su seguridad, deben evacuar inmediatamente hacia el sur", dijo el mensaje del ejército. La salva de cohetes del sábado fue reivindicada por el brazo armado de Hamás, que dijo que había tenido como objetivo una base del ejército israelí sobre la frontera.
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Imágenes difundidas en medios de comunicación, que Reuters no pudo verificar inmediatamente, mostraban a residentes abandonando Shejaia en carros tirados por burros y calesas, y a otros, incluidos niños que llevaban mochilas, caminando.
Las familias que vivían en las zonas atacadas comenzaron a huir de sus hogares al caer la noche del sábado y en las primeras horas del domingo, dijeron los residentes y los medios de comunicación palestinos, la más reciente de las múltiples oleadas de desplazamientos desde que comenzó la guerra hace 13 meses.
En el centro de Gaza, las autoridades sanitarias dijeron que al menos 10 palestinos murieron en ataques aéreos israelíes contra los campamentos urbanos de Al-Maghazi y Al-Bureij desde el sábado por la noche.
DIRECTOR DE UN HOSPITAL HERIDO POR DISPAROS
En el norte de Gaza, las autoridades sanitarias afirmaron que un avión no tripulado israelí lanzó bombas contra el hospital Kamal Adwan, que hirieron a su director, Hussam Abu Safiya.
"Esto no nos impedirá llevar a cabo nuestra misión humanitaria y seguiremos haciendo este trabajo cueste lo que cueste", dijo Abu Safiya en un vídeo difundido el domingo por el Ministerio de Sanidad.
"Nos atacan a diario. A mí me atacaron hace un tiempo, pero eso no nos disuadirá", dijo desde la cama del hospital.
Las fuerzas israelíes afirman que los militantes armados utilizan edificios civiles, como bloques de viviendas, hospitales y escuelas, como cobertura operativa. Hamás lo niega y acusa a las fuerzas israelíes de atacar indiscriminadamente zonas pobladas.
Kamal Adwan es uno de los tres hospitales del norte de Gaza que apenas funcionan, ya que, según el Ministerio de Sanidad, las fuerzas israelíes han detenido y expulsado al personal médico y han impedido que les lleguen suministros médicos de urgencia, alimentos y combustible.
En las últimas semanas, Israel afirmó haber facilitado la entrega de suministros médicos y de combustible y el traslado de pacientes desde los hospitales del norte de Gaza en colaboración con organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud.
Los residentes de tres ciudades asediadas del norte de Gaza -Jabaliya, Beit Lahiya y Beit Hanoun- afirmaron que las fuerzas israelíes habían volado cientos de casas desde la reanudación de las operaciones en una zona que, según Israel, estaba libre de militantes desde hacía meses.
Los palestinos afirman que Israel parece decidido a despoblar la zona de forma permanente para crear un tampón en el extremo norte de Gaza, acusación que Israel niega.
La campaña de Israel en Gaza ha matado a más de 44.000 personas, ha desarraigado al menos una vez a casi todos los 2,3 millones de habitantes del enclave, según las autoridades de Gaza, y ha reducido a escombros amplias franjas del estrecho territorio costero.
La guerra estalló en respuesta a un ataque transfronterizo perpetrado por militantes dirigidos por Hamás el 7 de octubre de 2023, en el que hombres armados mataron a unas 1.200 personas y se llevaron a Gaza a más de 250 rehenes, según los recuentos israelíes.
(Reporte y redacción de Nidal al-Mughrabi; edición en español de Javier López de Lérida)