Los ataques militares israelíes causaron el domingo la muerte de al menos 15 palestinos en Gaza, según los médicos, mientras las fuerzas israelíes seguían bombardeando el enclave y volaban casas en su extremo norte.
Mientras los combates se prolongaban durante casi 14 meses de guerra, el director de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) dijo que había tenido que interrumpir las entregas de ayuda a través de un paso fronterizo al día después de que bandas armadas dentro de Gaza se apoderasen de alimentos de un convoy de camiones.
"Esta difícil decisión llega en un momento en el que el hambre se agudiza rápidamente", dijo Philippe Lazzarini, de la UNRWA, en un post en X.
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En el campamento central de Gaza de Nuseirat, un ataque aéreo israelí mató a seis personas en una casa, y otro ataque mató a tres en una casa en la ciudad de Gaza, dijeron los médicos.
Dos niños murieron cuando un misil alcanzó un campamento de tiendas de campaña en Khan Younis, en el sur de la Franja de Gaza, mientras que otras cuatro personas murieron en un ataque aéreo en Rafah, cerca de la frontera con Egipto, según informaron los médicos a Reuters.
Los residentes afirmaron que los militares volaron grupos de casas en las zonas de Jabalia, Beit Lahiya y Beit Hanoun, en el norte de Gaza, donde las fuerzas israelíes llevan operando desde octubre de este año.
Los palestinos afirman que las operaciones israelíes en el extremo septentrional del enclave forman parte de un plan para expulsar a la población mediante evacuaciones forzosas y bombardeos para crear una zona tampón, acusación que el ejército niega.
El ejército afirma haber matado allí a cientos de militantes de Hamás en su lucha por impedir que la facción se reagrupe. El brazo armado de Hamás afirma que ha matado a muchas fuerzas israelíes desde que comenzó la nueva operación.
La interrupción de las entregas de ayuda a través del paso fronterizo de Kerem Shalom, controlado por Israel, se produjo casi dos semanas después de que un gran cargamento fuera secuestrado en la misma ruta.
Lazzarini, de la UNRWA, dijo que era responsabilidad de Israel "como potencia ocupante" proteger a los trabajadores humanitarios y los suministros, y que la operación humanitaria se había vuelto "innecesariamente imposible" debido a lo que dijo eran restricciones israelíes.
COGAT, el departamento militar israelí responsable de las transferencias de ayuda, niega que esté obstaculizando la entrada de ayuda humanitaria en Gaza, afirma que no hay límite en los suministros para civiles y culpa de los retrasos a Naciones Unidas, a la que califica de ineficaz.
El conflicto comenzó cuando militantes dirigidos por Hamás atacaron comunidades del sur de Israel el 7 de octubre de 2023, matando a unas 1.200 personas y secuestrando a más de 250 rehenes, según funcionarios israelíes.
La campaña militar israelí en Gaza ha matado a más de 44.400 personas y desplazado a casi toda la población del enclave, según las autoridades de Gaza. Amplias zonas de Gaza están en ruinas.
El domingo, en El Cairo, dirigentes de Hamás mantuvieron conversaciones con responsables de seguridad egipcios para estudiar la forma de llegar a un acuerdo con Israel que garantice la liberación de rehenes a cambio de prisioneros palestinos.
(Reportaje y redacción de Nidal al-Mughrabi; Edición de Andrew Heavens, Editado en español por Juana Casas)
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