El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, está presionando a las agencias de seguridad nacional de su país antes de la toma de posesión de Donald Trump para que diseñen nuevas estrategias que ayuden a hacer frente a los lazos peligrosos y profundos entre Rusia, Irán, Corea del Norte y China, según fuentes estadounidenses.
A cambio de la ayuda de Irán en el esfuerzo bélico ruso en Ucrania, Moscú le está proporcionando a su aliado aviones de combate, defensa antimisiles y tecnología espacial, concluyó Biden en un memorando de seguridad nacional publicado el martes.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, le está dando a Corea del Norte combustible, dinero y tecnología y la está reconociendo como un Estado nuclear de facto. Rusia está realizando patrullas conjuntas con China en el Ártico, según la Administración estadounidense.
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El documento clasificado fue descrito en términos generales a los periodistas, pero no ha sido revisado de forma independiente por Reuters. Rusia, China, Irán y Corea del Norte han rebatido evaluaciones similares en el pasado y han acusado a Washington de demostrar un comportamiento desestabilizador.
El nuevo documento de Biden ordena a varias ramas del Gobierno estadounidense que reestructuren los grupos actualmente organizados por regiones para centrarse mejor en las cuestiones que vinculan a los cuatro países que abarcan Europa y Asia.
Las estrategias y sugerencias políticas del documento podrían ser aplicadas —o rechazadas por completo— por el presidente electo republicano, Donald Trump, que asumirá el cargo el 20 de enero.
"Cuando el nuevo equipo lo examine, no creo que vea nada en él que intente encasillarle o inclinarle hacia una u otra opción política", dijo uno de los altos cargos de la administración Biden, que no quiso ser identificado.
Otro cargo dijo que quieren crear "nuevas opciones para que un nuevo equipo y el Congreso puedan empezar a trabajar de verdad".
Las fuentes dijeron que los retos futuros incluyen garantizar que las sanciones y los controles de exportación impuestos a los cuatro países se apliquen de una forma coordinada que no suponga un riesgo de represalia por parte de esos países y que permita a Estados Unidos gestionar mejor las crisis simultáneas que impliquen a varios de los países. Ahora hay tropas norcoreanas de servicio en Rusia, por ejemplo.
"Nos encontramos en un mundo en el que nuestros adversarios y competidores aprenden muy rápidamente unos de otros", afirmó uno de los responsables.
Sin embargo, hay límites a la cooperación entre los países, dijo otro de los cargos, incluido el hecho de que Rusia e Irán no ayuden a su aliado Bashar al-Asad, el expresidente de Siria, que fue derrocado el fin de semana.
"Este realineamiento plantea a China la cuestión de qué tipo de futuro quiere ver y si realmente quiere estar con esta agrupación", dijo la persona.
Con información de Reuters