Debido a las políticas de Javier Milei, el consumo real en los supermercados de la provincia de La Rioja sufrió una fuerte caída en diciembre de 2024. Se registró una disminución del 27,4% en comparación con el mismo mes del año anterior.
Aunque la facturación en el sector experimentó un crecimiento del 85,3%, la inflación en la región del NOA alcanzó el 112,7% en el mismo periodo, en el que se erosionó el poder adquisitivo de los consumidores.
Según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), la facturación en los supermercados de la provincia superó los $10.106 millones en diciembre. Sin embargo, en términos reales, el consumo se redujo significativamente debido al impacto inflacionario.
Para dimensionar esta caída, es necesario recordar que diciembre de 2023 estuvo marcado por una devaluación del 118% implementada por el presidente Javier Milei poco después de asumir el cargo. Ese ajuste provocó una inflación superior al 25% en ese mes, lo que ya había generado un fuerte deterioro en el consumo.
En La Rioja, el INDEC relevó las operaciones realizadas en los 16 supermercados más grandes de la provincia. Se incluyó tanto cadenas nacionales como locales. Durante diciembre, se efectuaron 345.596 compras en estos establecimientos, con un ticket promedio de $29.243 por operación.
Diferencias con la media nacional
A nivel nacional, la Encuesta de Supermercados del INDEC reflejó un incremento nominal del 94,2% en la facturación del sector en diciembre de 2024 respecto al mismo mes del año anterior. Esto significa que las compras en supermercados de La Rioja quedaron casi 9 puntos porcentuales por debajo de la media del país.
Las cifras divulgadas por el organismo estadístico evidencian una contracción significativa del consumo en la provincia, reflejando el impacto del proceso inflacionario nacional en el poder adquisitivo de los hogares.
Desde la asunción de Milei, se vendió ropa un 21% menos
Desde diciembre del 2023, la ropa registra una caída del 21% en términos reales durante el último bimestre del 2024. Este dato fue arrojado por una encuesta de la Cámara Argentina de la Indumentaria. Este retroceso afecta de manera directa a las empresas textiles de La Rioja, que junto a Catamarca concentran cerca del 30% de la producción nacional y dependen en gran medida del consumo interno.
En cuanto a la provincia riojana señalaron que el 70% de las empresas textiles declararon un incremento nominal en la facturación por debajo de la inflación, lo que evidencia una pérdida del poder adquisitivo en el sector. Además, las ventas en unidades descendieron un 1,2% en comparación con el mismo período del año anterior, lo que representa una desaceleración respecto al bimestre anterior.
Desde la Cámara Argentina de la Indumentaria informaron que este fenómeno está vinculado a la imposibilidad de trasladar el incremento de costos a los precios finales, dado el desplome de la demanda y explicaron: "La diferencia entre la caída en las ventas reales (-21%) y en unidades vendidas (-1,2%) se debe principalmente al fuerte abaratamiento de la ropa en términos relativos durante este 2024. Mientras los precios de la ropa (y del calzado) subieron 84,5% en 2024, la inflación nivel general fue de 117,8%".
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