Dólar: el dato que puede obligar a Milei a una devaluación

El informe de una consultora privada advierte que el déficit y los problemas por el tipo de cambio. 

07 de enero, 2025 | 11.41

El déficit bilateral en el comercio con Brasil se amplificará en 2025 y probablemente supere los 3.000 millones de dólares, de acuerdo con proyecciones de la consultora Abeceb. El documento estima que este año las importaciones provenientes de Brasil difícilmente crezcan menos de 30% (a 18.500 millones de dólares como piso) y exportaciones subirán pero a menor ritmo (12 por ciento a cerca de 15.500 millones).

La consultora proyectó que la recuperación de la actividad, el consumo y la inversión en la Argentina será un factor crucial en el aumento del déficit comercial bilateral, en un contexto en que se mantiene el atraso cambiario.

"Siempre estructuralmente somos deficitarios con Brasil y es de esperar que un rebote importante de las importaciones en general y del país vecino en particular, en un contexto de eliminación del impuesto país y un peso argentino que se ha apreciado significativamente frente al real brasileño", detalla el informe.

Las tensiones de origen fiscal en Brasil que están llevando a un fuerte debilitamiento de la moneda brasileña podría exacerbar aún más el aumento del déficit comercial bilateral. La depreciación del real brasileño juega a favor de un saldo comercial más favorable a Brasil al aumentar la competitividad brasileña.

En 2024, la balanza bilateral con Brasil terminó con un rojo de 308 millones de dólares, que marca una mejora sustancial si se lo compara con el déficit de 4.714 millones acumulado en 2023. Por su parte, en diciembre, Argentina registró un leve déficit con Brasil de 52 millones, la sexta cifra negativa en el año.

Malas relaciones

La relación de monedas alcanzó en el último mes del año pasado su menor nivel en su historia, a 6 reales por dólar, mientras que el tipo de cambio bilateral está en su peor relación (en desmedro del peso argentino) de la última década. De acuerdo con el relevamiento del Banco Central, el tipo de cambio real bilateral ubica al peso apreciado en unos 25 puntos porcentuales respecto del real brasileño, en su mayor nivel desde diciembre de 2015.

Tanto China como Brasil muestran devaluaciones de sus monedas (de forma más marcada Brasil) al igual que varias monedas emergentes. El impacto en lo local de estas decisiones es directo, considerando que, entre estos dos socios, se concentra casi el 50 por ciento del intercambio comercial.

Eso afecta de manera directa a la competitividad del peso, que se determina en relación con una canasta integrada por las monedas de países que comercian con la Argentina. Sin embargo, la guerra de moneda no se desplegaría en la arena de la economía real. El carry trade que impulsa el dueto Caputo-Bausili para atraer divisas podría verse perjudicado, dado que el Brasil también aplicó una política de tasas de interés reales positivas para evitar una aceleración inflacionaria.