Las autoridades de la Agencia de Prevención de Violencia del Deporte (Aprevide) evalúa la posibilidad de hacer jugar este sábado a Quilmes a puertas cerradas en el torneo de la Primera Nacional de fútbol, a partir de una bandera amenazante que colgaron en la tribuna contra los árbitros en las últimas horas.
El organismo bonaerense, a partir de lo dicho por su titular Eduardo Aparicio, está revisando las cámaras de seguridad del estadio Centenario para determinar quiénes son los responsables de haber instalado ese trapo en la tarde del martes, en ocasión de un encuentro amistoso entre el elenco cervecero y Argentino de Quilmes, en donde estuvo en juego una Copa entregada por el Municipio de la provincia.
Quilmes tiene previsto jugar este sábado, a las 19.10, ante Independiente Rivadavia Mendoza, en partido correspondiente a la fecha 28 de la sección B del torneo de la Primera Nacional.
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Cuando matemos un árbitro nos van a dejar de robar rezaba la bandera exhibida en la tribuna Omar Indio Gómez del escenario quilmeño.
La dirigencia del club mandó a sacar la bandera con la amenaza y posteriormente fue secuestrada por las autoridades policiales. Luego se le dio intervención al Juzgado Correccional número 1 de Quilmes por infracción de la Ley del Deporte 11.929.
No podemos permitir estas cosas en el fútbol. Es una amenaza de muerte. No, no, paremos la mano. Yo entiendo la pasión del fútbol, pero una amenaza de muerte no es un mecanismo que se pueda tolerar, afirmó hoy Aparicio, en declaraciones al canal de noticias TN.
En tanto, Mateo Magadán, presidente de Quilmes, remarcó haber salido automáticamente a repudiar la situación. De hecho, la bandera estuvo menos de dos minutos y fue secuestrada, dijo el dirigente.
Esto lo hizo un anti-Quilmes y vamos a identificar a los responsables. Aprevide ya está trabajando con las cámaras y creo que los socios del club no tienen que pagar los platos rotos porque esto no lo hizo gente del club, agregó.
El enojo del público cervecero tiene relación directa con la controvertida decisión que tomó el domingo pasado el árbitro Juan Pafundi, quien anuló un tanto legítimo que había marcado el elenco del DT Mario Sciacqua en tiempo de descuento del partido frente a Deportivo Maipú de Mendoza, que finalmente perdió por 1-0. La maniobra fue invalidada por una supuesta posición prohibida de Gabriel Díaz.
Respecto de los fallos arbitrales en contra de mi club, los tomo como errores humanos de gente trabajadora y con buena fe, que se equivocan lamentablemente en contra nuestro, pero sin mala intención, aclaró Magadán.
Por su lado, la Asociación Argentina de Arbitros (AAA) repudió enérgicamente la bandera exhibida y solicitó a Aprevide la intervención a la brevedad ante este hecho de violencia que representa una grave amenaza hacia el plantel arbitral en su totalidad, dijo.
Con información de Télam