El líder del campeonato de Fórmula Uno, el piloto de Red Bull Max Verstappen, tendrá una penalización de cinco puestos en la parrilla para la carrera del domingo en Brasil, en un impulso para su rival de McLaren, Lando Norris.
El delegado técnico de la FIA, Jo Bauer, dijo en un comunicado el viernes que el piloto neerlandés utilizará su sexto motor de combustión interna para la carrera en Interlagos, su segunda infracción de este tipo de la temporada.
La cantidad permitida para la campaña es de cuatro y Verstappen recibió una penalización de 10 puestos por usar un quinto motor en el Gran Premio de Bélgica en julio.
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El reglamento establece que la primera infracción supone una pérdida de 10 puestos, con descensos de cinco puestos para las siguientes.
Verstappen tiene 47 puntos de ventaja sobre Norris a falta de cuatro rondas, incluidos los dos sprints del sábado, y un máximo de 120 puntos aún por ganar.
El circuito de Interlagos de Sao Paulo es relativamente fácil para los adelantamientos, por lo que es el mejor lugar para penalizar en la parrilla de las carreras que faltan.
El compañero de equipo de Verstappen, el mexicano Sergio Pérez, tendrá un cambio de chasis mientras busca poner fin a una nefasta racha de actuaciones.
"Le hemos vuelto a cambiar a un chasis diferente", dijo el ingeniero jefe de Red Bull, Paul Monaghan, a "Ha preguntado si podemos: sí, bien, de acuerdo. Los chicos han tenido un poco de trabajo, pero no les ha importado, así que allá vamos".
(Escrito por Alan Baldwin en Londres, Editado en Español por Manuel Farías)