La prestigiosa Revista Nature advirtió sobre el “colapso” de la ciencia argentina bajo el gobierno de Javier Milei, a un año del comienzo de su mandato. Según la publicación, el desmantelamiento de la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología -antes Ministerio- y la reducción del presupuesto bajo el slogan “no hay plata” colocaron al sistema científico en una situación límite. Además, destacaron que la pérdida del poder adquisitivo de las y los científicos bajo el ala estatal los empuja a buscar oportunidades en el exterior.
La nota se basa en los datos y testimonios de personas que son parte del sistema científico argentino, con altos cargos, así como investigadores de reconocidas instituciones, que son clave para conservar la salud de la población a través del trabajo que llevan adelante. Tal es el caso del director del Instituto de Investigaciones Biomédicas en Retrovirus y Sida (INBIRS), Jorge Geffner: “Con seis meses más como este, no quedará nada de la comunidad científica”, dijo y alertó que la situación es “muy, muy crítica”.
Para graficar la situación, allí contaron que las y los científicos argentinos que reciben pagos del Estado perdieron hasta el 30% de sus ingresos. Por ejemplo, a partir de 2022, el gobierno financió alrededor del 60% de la investigación y el desarrollo en Argentina, y el resto provino del sector privado y contribuciones internacionales. “Como resultado, el país enfrenta una fuga masiva de cerebros”, aseguraron y pusieron de ejemplo INBIRS, en donde aproximadamente la mitad de su personal está considerando buscar trabajo en otros países o ya está haciendo el papeleo, según contó.
También señalan que el recorte del presupuesto impactó en la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación, principal financiador de proyectos de investigación en Argentina, y prácticamente está el trabajo. Es que, a pesar de que el 85% de su dinero proviene de organismos internacionales como el Banco Interamericano de Desarrollo, el Gobierno no autorizó la utilización de ese dinero y, por ello, la ex presidenta de la agencia, Alicia Caballero, renunció a su cargo en septiembre.
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Entre los casos que cuentan que están yéndose, figura el testimonio del físico Luis Moyano, del Centro Atómico Bariloche, quien decidió emigrar a España tras constatar que su salario no alcanzaba para alquilar una vivienda para su familia. Él había regresado a la Argentina en 2016 gracias al programa Raíces, diseñado para revertir la fuga de cerebros, pero ahora considera que las condiciones son insostenibles: "Nunca estuvimos en una situación ideal, pero todo está peor con el nuevo gobierno", afirmó. En España, Moyano espera ganar al menos cuatro veces lo que percibía en su país.
Aunque la inflación mensual bajó del 25,5% en diciembre de 2023 al 2,7% en octubre de 2024, Nature señaló que el costo de estas políticas es alto: la pobreza aumentó 11 puntos porcentuales y el Producto Interno Bruto se contraerá un 3,5% al cierre del año. El artículo concluye que, si no se toman medidas para revertir los recortes en ciencia, Argentina sufrirá una pérdida irreparable en su capacidad de producción científica y tecnológica.