La lluvia de estrellas de las Leónidas podrá ser vista en el cielo entre el 16 y el 17 de noviembre, cuando llegará a su pico. Cómo hacer para poder verla desde la Argentina. Este fenómeno astronómico recibe su nombre de la constelación de Leo, desde donde provienen los meteoros que se desprenden del cometa Tempel-Tuttle para generar el efecto de lluvia. Los fragmentos de cuerpos celestes se verán en todo el cielo.
Las leónidas se destacan por su colorido y velocidad, ya que suelen ser meteoros más grandes, brillantes y con mayor duración. También por al presencia de meteoros "raspadores de tierra", que aparecen cercanos al horizonte y llaman la atención por sus colas largas y muy coloridas.
La lluvia de meteoros tendrá mayor visibilidad en el hemisferio norte, pero eso no hará imposible observarla desde el hemisferio sur. Si bien no es necesario ningún instrumento, como un telescopio o binoculares, sí se necesitan ciertas condiciones para favorecer el avistamento.
¿Cómo ver la lluvia de estrellas en noviembre 2020?
Primero, debemos tener en cuenta que el promedio de la lluvia es de entre unos 10 a 15 meteóros por hora y el mejor momento para verlos será entre la medianoche y el amanecer de ambos días.
Aunque no se necesita ningún tipo de instrumento, es sabido que la contaminación lumínica atenta contra las chances de presenciar este fenómeno natural. Es por eso que se recomienda alejarse de las grandes ciudades y acudir a lugares menos iluminados. En ese sentido, también se debe contemplar un período para que nuestra vista se ajuste a la oscuridad y nos permita ver más detalles en el cielo nocturno.
Para tomar fotos de la lluvia de estrellas, la propia NASA realizó recomendaciones. En principio, sugiere usar cámaras que permitan enfoque manual, acomodarlas sobre un trípode con cable disparador o utilizar la función de temporizador. Para mejores tomas, se aconseja usar un lente gran angular.
Luego llega el eclipse penumbral de Luna
Los eclipses son uno de los fenómenos más esperados en el mundo entero y este año el último de Luna será el próximo 30 de noviembre, para despedir el mes con todo.
Se trata de un eclipse lunar penumbral que, a diferencia de los habituales, se caracteriza por presentar un ligero oscurecimiento de la superficie de la Luna. Este efecto se produce porque la Tierra bloquea de forma parcial la luz solar que el satélite refleja.
La Luna atraviesa la sombra parcial de la Tierra, conocida como penumbra, lo que hace que el oscurecimiento sea apenas perceptible. Para poder observarlo es necesario contar con ciertas condiciones favorables, como un buen clima y un cielo despejado. No obstante, no se necesitan ni binoculares ni telescopios ni ninguna herramienta para mirarlo.
De acuerdo con la información de la NASA, este fenómeno podrá ser visto en América del Norte, América Central y parte del nororiente de Asia. En el resto de Asia y Oceanía, sólo podrá detectarse cuando la Luna salga, en tanto que en Sudamérica, Islandia y parte de escandinavia podrá detectarse cuando esta se ponga. África, Europa y Asia occidental no tendrán la chance de presenciar el fenómeno.