Internas entre China y la NASA por un estudio en Marte

Un importante estudio realizado por China y Marte en el espacio exterior reveló fuertes internas entre ambas partes. Qué pasó.

21 de junio, 2022 | 13.45

China y la NASA llevan adelante un importante estudio en simultáneo que está vinculado con Marte. Al respecto, se informó en qué estado se encuentran y los detalles revelaron una fuerte interna entre el país asiático y el organismo aeroespacial.

La ambiciosa misión de China y la NASA tiene que ver con enviar las primeras muestras de roca en Marte a la Tierra. Cada uno tiene en el radar un mapeo de investigación, con el objetivo de lograr la hazaña y revolucionar los estudios del espacio exterior y los planetas vecinos.

En cuanto a China, la semana pasada se terminaron de delinear los últimos detalles a través del jefe de la actual misión de orbitadores a Marte de China perteneciente a la Administración Nacional del Espacio de China (CNSA). Para lograr la recolección y posterior entrega de las rocas, el país asiático planea avanzar una nave espacial al Planeta Rojo a fines de 2028 en una misión que terminaría con la entrega de muestras a la Tierra en julio de 2031.

Con estos datos, el trabajo realizado por China da cuenta de una culminación del estudio antes que la NASA, organismo que precisamente se encarga de todos los programas e investigaciones espaciales y que se alarmó por esta situación. Sin embargo, la investigación en curso de la institución estadounidense justificó la demora.

La codiciada hazaña en el Planeta Rojo refiere una "alta complejidad y una gran investigación y pruebas" e indicaron que la misión propuesta por China tiene "más simplicidad". Por fuera de las internas entre ambas partes, los científicos llegaron a un punto en común y es que las recompensas de entregar con éxito las muestras a la Tierra son "enormes" para determinar si hubo vida en Marte.

Cómo será el desarrollo de la investigación de China y la NASA

Por un lado, la Administración Nacional del Espacio de China (CNSA) demostró el año pasado que tiene la tecnología para llegar a Marte y desplegar un rover -vehículo de exploración espacial- en la superficie. Devolver muestras a la Tierra requiere varios pasos adicionales tales como volar el material al espacio en un vehículo de ascenso, transferirlo a una nave espacial con destino a la Tierra, viajar de regreso a la Tierra y liberar una cápsula que contenga las muestras para el descenso final al suelo. "La nueva estación espacial abrirá nuevos horizontes a medida que los humanos buscan aprender más sobre el cosmos", afirmó el presidente de China, Xi Jinping.

En tanto, la NASA tiene a Perserverance, un robot que anda disperso por Marte recolectando todo tipo de información bajo el mismo objetivo. Ya obtuvo información sobre suelo marciano de otras áreas de interés y durante su exploración del delta, se espera que reúna ocho muestras adicionales. El material será devuelto a la Tierra en la misión que comparte con China, lo que permitirá a los científicos utilizar potentes equipos de laboratorio para confirmar si alguna vez existió vida en el planeta distante.

China detectó una "señal extraterrestre" pero borró su hallazgo

Una publicación en la revista SciTechDaily financiada por China aseguró que el telescopio Sky Eye en el suroeste chino recibió señales de podrían pertenecer a una civilización extraterrestre. Sin embargo, tiempo después la publicación desapareció, algo que despertó aún más las sospechas.

El artículo inicial hablaba de que el telescopio habría detectado “varios casos de posibles rastros tecnológicos y de civilizaciones extraterrestres”, pero el portal y el Gobierno chino no dieron explicaciones al respecto. Tiempo después, la revista volvió a publicar una nota en la que refiere a que se detectó una “ráfaga de radio rápida” (FRB) que es común detectar; lo extraño es que esta señal pulsa “regularmente cada 16.35 días”.

Una FRB “es un pulso de radio transitorio de una longitud que oscila entre una fracción de milisegundo, causado por algún misterioso proceso astrofísico de alta energía que aún no se ha descubierto”, según explica. El nuevo artículo intenta restarle importancia al descubrimiento y explica que se encontraron otras ráfagas similares que pertenecen a un estallido de un objeto que emite estas señales de forma frecuente y repetitiva.

Señales de estas características se detectan de manera regular desde 2007 y entran dentro de la categorización de frecuencias “anómalas”. Se trata de emisiones que tienden a ser “únicas”, pero en raras oportunidades muestran patrones regulares. Aunque, la comunidad científica aún no pudo explicar estas señales, intenta avanzar con cautela para evitar el revuelo, puesto que se podría tratar de una interferencia en la frecuencia.